Salonières: Mujeres que crearon salones ilustrados en el S.XIX
Tras la Revolución Francesa de 1789, el fin del absolutismo y la caída del Antiguo Régimen por toda Europa encontramos una eclosión de las ideas liberales en los distintos estados-nación europeos, que permitieron no solo una mayor tolerancia política y cultural, sino también la liberación de dogmas y estereotipos que repercutían sobre todo a las mujeres.
Es evidente que esta consecución de derechos y liberación de los prejuicios existentes en una sociedad patriarcal no se dio de un día para otro, sino que gracias a las actuaciones de todas las mujeres que hemos visto a lo largo de los posts, la sociedad europea poco a poco se fue abriendo a un mundo más tolerante y feminista (aunque todavía quede mucho por hacer).
Sin embargo, antes de llegar a nuestra situación actual, muchas mujeres lucharon por sus derechos y por ganarse una posición en un mundo dominado por hombres. Llegamos a este punto a la fundación de casas, conventos y academias por parte de mujeres de alta cuna que fueron los lugares idóneos para la organización política, el debate y el desarrollo intelectual de las mujeres durante el S.XIX. Además muchas de ellas fueron grandes mecenas con aspiraciones sociales y políticas, lo que favoreció la creación de salones donde el diálogo y el ocio se convirtieron en el símbolo de la elegancia para la nobleza.
De esta forma, para muchas historiadoras los salones europeos cumplieron tres funciones: eran espacios de libertad para el pensamiento, para el encuentro de distintas mujeres con diferencias estamentales, y sobre todo espacios para la emancipación femenina. En el caso concreto de Europa, durante el S.XIX encontramos dos tipos de salones distintos, el salón francés propio de la Ilustración y el salón judío-berlinés propio del romanticismo.
Cabe destacar que estos salones se pudieron desarrollar gracias a las clases más pudientes del momento, ya que se podían dedicar al ocio y a la contemplación. Es por ello que no encontraremos mujeres campesinas o trabajadoras de las ciudades en estos espacios, ya que las diferencias de clases eran casi tan evidentes como las diferencias de sexos en la sociedad europea del S.XIX.
A pesar de todo, debe agradecerse las actuaciones de las distintas mujeres que impulsaron estos salones, ya que se convirtieron en una institución propiamente femenina, creando una atmosfera de cultura, de diversión, de debate político, y sobre todo, de reducción de las diferencias de género latentes en estos momentos.
Por todo ello, podemos afirmar que el fenómeno cultural de los salones logró crear un gran interés hacia la profesionalidad, tanto literaria como política (en la medida de lo posible) por parte de las mujeres europeas, quienes dejaron de ser agentes pasivos e intervinieron activamente en la historia.
Propuesta didáctica: A continuación os dejo un artículo muy interesante sobre la eclosión de los salones femeninos durante el S.XIX. Vuestra tarea será leerlo y hacer una breve comparación entre los salones franceses y berlineses, remarcando las principales diferencias y similitudes entre ellos así como su importancia para la emancipación de las mujeres durante el S.XIX.
Artículo: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/5339138.pdf

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